Harvey York entrecerró los ojos levemente después de escuchar el nombre. Sintió que podría ser el plan de alguien.

Yoana Mendoza respondió con frialdad: “¿Por qué me buscaste por un asunto tan pequeño?”.

“Hay tanta gente en la sucursal del Palacio Dragón. Hay personal de nivel oro a cargo de este tipo de cosas. ¡Solo haz que hagan el trabajo!”.

La mujer estaba ansiosa.

“¡No puedo, Jefa Mendoza! Esos isleños tienen un estatus extraordinario. Son del Camino Shinkage…”.

“El Camino Shinkage es una de las Seis Escuelas de Artes Marciales en la Nación Insular. ¡Son igualmente famosos como el Camino Shindan!”.

“¡Con nuestra fuerza actual, no somos rival para el Camino Shinkage!”.

“No podemos darnos el lujo de ofenderlos. Por eso necesitamos tu ayuda para ver si están dispuestos a respetarnos, Jefa Mendoza”.

La mujer observó las acciones de Yoana mientras hablaba frenéticamente, como si quisiera ver las reacciones de Yoana.

Harvey se rio entre dientes sin decir nada. Quería ver cómo m