--- Bruno Wilson ---
Al ver cómo Ana comienza a toser y moverse como si le faltara aire, corro a ver al médico, por suerte, iba uno pasando. El hombre inmediatamente la atiende y le pone un calmante, está claro que Ana no está bien, ni física, ni emocionalmente.
Poco a poco veo que se va quedando dormida, varias horas más tarde, Dominik llega, su semblante es frío y se ve que está lo que sigue de molesto, solo llega y se sienta a lado mío, por un momento se queda callado, luego habla.
- ¿Cómo está ella? – Dice preocupado.
- Dom, ¿Tú sabes lo que pasó? O me preguntas para evitarte reconocer que tu amada, lastimó a Ana. – Digo molesto.
- Sé que crees que no haré nada al respecto, pero ya lo hice, ya investigué… - Dice mientras ve a ningún lado. - ¿Cómo está, Ana?
- Le tuvieron que poner un calmante, está completamente dormida, tuvo un ataque de pánico. Dominik, ¿Es verdad que la despediste? – Pregunto para ver su respuesta.
- Sí, dije muchas cosas, antes de saber lo que realmente sucedió