Gerardo y Andrea se miraban fijamente en el estudio de Don Eduardo. La propuesta de Gerardo era libre, y sólo era permiso para acompañar a Andrea en el proceso que estaba por enfrentar con Javier. Las afirmaciones de Andrea respecto a la actitud insegura de Gerardo también tenían peso en el ambiente.
- Tienes que ganarte la confianza que quieres compartir conmigo – Le dijo Andrea amable, pero firmemente.
- No merezco otra cosa