—Antes sí, pero ahora no —respondió en tono frío.
—¿Por qué? ¿Qué te hizo? —interrogó Valeria.
—No la respetó, en nuestro propio techo, si no llego, quien sabe lo que hubiese pasado —habló muy molesto
Valeria no dejaba de burlarse de su esposo —¿De qué siglo escapaste? Ah, pero a mí si me preparabas