9. Perdóname
GABRIEL
Pasamos a su oficina y cerró la puerta.
- ¡No tienes ningún derecho a venir aquí y decir que eres mi novio! me lo dejaste muy claro en el auto, no soy nadie para ti, y tienes toda la razón, me dejé envolver por fantasías estúpidas, y la idea de por fin echar a andar mi negocio. ¡Qué tonta!
- Sam, escúchame . . .
-¡No quiero escucharte! - dijo exaltada - solo quiero que te vayas, y desaparezcas de mi vida.
- Princesa por favor, perdóname.
- ¡No soy tu princesa, no soy nadie!, vete ya.
Me di la vuelta para irme, pero tenía que decirle algo.
- No sabes cómo me arrepiento de las palabras que te dije, lo siento. . . te amo. . .
Cerré la puerta detrás de mi, salí a la recepción, aún estaba el ex novio rondando, si pudiera le arrancaría la cabeza.
Subí a mi auto y me fui a mi departamento.
SAMANTHA
Me quedé congelada por esas dos simples palabras, ¿habia escuchado bien?, él lo había dicho, 'Te amo'. Me senté en el piso y lloré en silencio, ¿se sentía igual que yo?, ¿habia sido d