Capítulo 44 Sabes tan bien como imaginé
Eleonor estaba a punto de salir del edificio con la idea firme de irse directo a casa. La tensión nerviosa ponía alas a sus pies. No volvería. Ya vería como pagar las cuentas, pero no volvería. No podría soportar la ansiedad.
Pero justo cuando atravesaba la puerta giratoria del imponente edificio, Luca la detuvo tomándola suavemente por el antebrazo.
—Vamos… yo te llevaré, fue tu primer día aquí, y creo que no te fue muy bien.
Eleonor alzó las cejas, incómoda. ¿Qué le pasa a este hombre? ¿Por qué no la dejaba en paz?
—En realidad es temprano… Puedo ir en taxi… o en autobús —respondió con una sonrisa forzada, intentando sonar casual.
No quería que Luca siguiera prestándole tanta atención. No porque le molestara él, sino porque ya había alguien empeñado en arruinarle la vida con solo verla cerca del jefe.
Luca entrecerró los ojos.
—Parece que estás huyendo de mí. ¿Puedo saber por qué?
Eleonor bajó la mirada. Se sintió atrapada, como si la hubier