POV ISABELLA
Aquella noche era completamente hermosa. Si mirabas con atención al cielo, te podrías dar cuenta que, estaba perfectamente despejado de nubes y la vista te regalaba un impresionante panorama de las estrellas que lo adornaban en su totalidad. También, una leve pero presente ventisca, movía con delicadeza las ramas de los árboles, el cual creaba un ambiente tranquilo y deshabitado.
Creo que no fui consciente del tiempo que pase observando el majestuoso paisaje, estaba segura que no pudo haber pasado más de unos segundos, cuando resignadamente me di cuenta que no lo podía seguir admirando más, había alguien que estaba esperando por mi a mis espaldas.
Con un poco de miedo y sobre todo desconfianza, voltee suavemente para verlo cara a cara.
Llevaba puesta una camisa negra que tenía desabrochados los primeros botones de ella, lo cual permitía observar parte de su pecho e indicios de su tonificado abdomen; además, su pelo ya no estaba perfectamente peinado como en la mañana,