Jake Huxley
Las semanas se han pasado largas y tortuosas, especialmente porque Will tuvo que ir a arreglar un problema con su familia y si él no está, yo no me puedo mover, por lo que me toca ver a Lily todos los días. Aunque dijo que sólo sería una semana, las cosas se le complicaron más y no le quedó más remedio que quedarse.
—Me voy a volver loco… —me digo a mí mismo cuando salgo del cuarto y la veo pasando la aspiradora ella misma, pero no con una expresión triste, sino con la más grande de las sonrisas. Camino hasta la puerta y le digo con pesadez—. ¿No es hoy que debes ir a ver a la doctora para la inseminación?
Ella se detiene, se incorpora y asiente, deja la aspiradora de lado para hacerme las señas, las que volvió a aprender a través de un curso en línea debidamente vigilado por los guardias de la casa. Me dice que será por la tarde y yo salgo de allí sin más que decirle.
Lo único que deseo es que todo esto se termine, aunque ya ni sé para qué.
Cuando llego abajo me anunc