—Arturo sabes el error que acabas de cometer al dejar que laila te marque a ti—
Estaba de pies con ella aún dormida en su forma animal, cabe destacar que no era tan pequeña su pelaje blanco se había manchado de mi sangre y pesaba un poco más de lo habitual
—se su pone que es mi pareja padre, no le veo nada de malo—
Papá estaba muy alterado mientras kevin y linda no paraban de ver a laila con brillos en los ojos es una loba verdaderamente hermosa
—Arturo, un alfa no se deja marcar por su pareja, la manada lo tilda de débil y que será un alfa fácil de dominar al dejarse marcar por su compañera—
Mire a mi padre sin decir una sola palabra y seguí mi camino dejándolo con la palabra en la boca tenía que llevar a laila a mi aposento.
—¿a donde la llevas?—
Dijo linda dando un paso hacia a mi un tanto nerviosa
—a mi habitación donde ya pertenece—
Sin importarme más aquella conversación caminé con prisa y pude escuchar a mis espalda a mi madre hablarle a mi padre
—no seas tan duro con él, ta