—Que te torturarán por una m*****a semana. ¿O es que las palizas y las descargas eléctricas no fueron suficiente? Tuviste suerte de que te encontrásemos en una redada, una hora más y te hubieses quedado sin dedos en la mano izquierda, imbécil.
—Qué exageración Julia por Dios. Sólo llegaron a cortar