En ese momento, Marcos estaba verdaderamente angustiado y asustado.
¿Quién podría imaginar que el anciano de apariencia poco llamativa frente a él sería el legendario "Carnicero" con un rastro de sangre detrás de él?
¿Qué diablos había ocurrido?
¿Qué había llevado al "Carnicero" a aparecer en persona?
—¿Te atreves a golpearme?
En ese instante, Francisco se levantó tambaleante y rugió:
—¡Están acabados, todos ustedes están acabados! ¡Traigan gente, mátenlos a todos!
—¡Alto! —Marcos interrumpió con una voz alta y luego se arrodilló pesadamente ante el anciano de traje—. ¡Sr. Ángel! No sabemos en qué forma le hemos ofendido, pero por favor tenga piedad y déjenos salir de esto con vida.
—¡Papá! ¿Te volviste loco? ¿Por qué te arrodillas ante él?
Francisco estaba incrédulo.
Tenían todas las cartas a su favor, ¿por qué estaban disculpándose?
—¡No entiendes nada! No podemos enfrentarnos a estas personas, ¡arrodíllate ahora! —Marcos le hizo señas frenéticamente.
—¡No me arrodillaré!
Francisco c