247. Baila Conmigo
Golondrina
Todo giraba como debía ser desde un comienzo, mis hermanas se habían marchado decididas, ya estaban ayudando al aquelarre amigo, que había sufrido algo que ningún aquelarre había sufrido antes. En nuestro propio aquelarre, el luto marcaba nuestro día a día, la partida de una hermana era nuevo para todas nosotras, algo que no sabíamos como digerir, pero cada vez que se apagaba una luz de una de nosotras, otra aparecía, por lo tanto, había que estar atentas a las señales, porque nuestra hermana aparecería. Solo esperaba que pudiera llegar a nuestro aquelarre antes de que todo el mal que se estaba gestando la pudiera alcanzar.
-te veo preocupada ¿en qué te puedo ayudar?-preguntaba el alfa Crom, mientras miraba como sus guerreros entrenaban con los ejecutores vampiros, que seguían apareciendo.
-nadie puede ayudarme alfa, no te preocupes por mí, es algo que solamente el tiempo me adormecerá y mis estúpidas decisiones son las que me tienen así, al punto qué ahora ruego por alguna