Nos quedamos un largo rato simplemente abrazados en silencio, ninguno de los dos quería soltar al otro. Pero nada dura para siempre el teléfono de Nolan comenzó a sonar era su mamá.
- Lo siento nena debo contestar - Se separa de mi para tomar su teléfono - Hola Mamá, si estoy en casa. Espera un momento.
Me da un suave beso y sale al balcón a contestar.
NOLAN
Abro la puerta corrediza y resoplo antes de continuar la conversación
- Ya puedo hablar mamá ¿Qué es tan urgente?
- La tinta de las cartas se esta desvaneciendo, la chamana me dijo que debes darte prisa o estaremos condenados por la eternidad.
- Mamá basta, me siento agotado. Al fin la encontré no quiero hacerla sufrir de nuevo, podría solo quedarme a su lado en esta vida y hacerla feliz.
- ¡Nolan no se trata solo de ti! - Grita molesta
- Todos tenemos culpa, no solo yo. Porque no mejor piensas en tus errores y te arrepientes - Finalizo la llamada antes de que pueda decirme algo más
Acaso no se da cuenta de todo el dolor que causo