16.
Y ahí estaba, literalmente en un estado lamentable. Sentía pena por Ayra pero también por mi mismo, y por mi madre que estaba intentando todo para ayudarnos.
- Como que no podemos? murió acaso? siempre hay una forma. Por que razón te estas dando por vencido? - Me dijo y yo no sabía que responder porque no podía pensar con mucha claridad.
- No se me ocurre nada- conteste y el dolor en mis manos se volvió insoportable.
- Pues se nos ocurrirá. Vamos al hospital- Dijo y yo me levante del mueble para seguirla.
Llegamos a emergencias y nos atendieron rápidamente. Por la apariencia a simple vista la doctora que me atendió le dijo a mi madre que tenía los huesos metacarpianos de la mano fracturados.
- Chico guapo estuviste de pelea, o eres boxeador? - cuestionó la doctora revisando mas a fondo mis manos, parecia incluso que me estaba coqueteando, mi madre me golpeó con el codo haciendo alusió