Regresé a mi casa con Levi y la pequeña Alaska cuando empezó a oscurecer; entramos y dejé a Alaska en el suelo para que subiera a mi cuarto; Yo comencé a subir las escaleras, pero me dolía el abdomen, así que Levi dejo las cosas de Alaska en el suelo y me tomo en brazos con cuidado. Subimos a mi habitación y Alaska se quedó al lado de mi cama esperando a que la subiera.
Levi bajó nuevamente y regresó con todo lo que habíamos comprado para Alaska