Hacía muchos días que el lobo Mat no sentía la satisfacción que experimentaba en ese momento. Sin embargo, también se apoderaba de él un miedo abrumador ante la inminente revelación de quién era su humano, Isis. Tendrían que pensar muy bien qué hacer al respecto. Decidieron dirigirse al hotel, donde Jacking quería investigar más sobre esos vampiros que rondaban la manada. Necesitaban saber quiénes eran y, si era posible, deshacerse de ellos.
Al llegar a su hogar, Jacking fue recibido por Neiti, la hija de la bruja Teka-her, quien traía consigo a una mujer enigmática que instantáneamente reconoció como una Meiga (bruja vampira).—Buenos días, mi Alfa —saludó, inclinando la cabeza. —Buenos días, Neiti. ¿Qué te trae por aquí? —preguntó, frunciendo el ceño.—H