JACKING:

Amet se inclinó hacia él, colocando una mano sobre su hombro. El impacto de su toque pareció resonar en el ambiente como un latido contenido.

—El comienzo de hacer crecer a tu lobo —expliqué, revolviendo su cabello—. Muy bien, ahora puede que te duela un poco. Voy a despertar a tu lobo, Anker.

—¿Mi lobo se llama Anker? —preguntó Héctor con admiración—. ¿Cómo lo sabes?

—Soy el Alfa Supremo, Héctor. Todos los licántropos responden ante mí aún sin haber nacido —expliqué ante sus ojos asombrados.

—Disculpe, mi Alfa —Héctor se inclinó delante de mí—. Es que estoy asombrado. Pero ya estoy listo.

Vuelvo a convertirme en Alfa Supremo y seguimos transmitiéndole energía vital a Héctor hasta que vemos que se le iluminan los ojos y suelta un enorme grito, cayendo de rodillas. Pero no nos detenemos. El Alfa Supremo comienza a conjurar, lanzándole otro potente rayo de energía por los ojos a Héctor, quien comienza a convertirse en un hermoso lobo dorado con un diamante ne