Pero mi sonrisa decae un poco cuando me doy cuenta de que es... él.
"Mi reina", dice el Príncipe de Atalaxia, seguido de una reverencia nítida y formal. "Es un placer conocerla".
Me quedo un poco inmóvil y mi sonrisa aumenta un poco ante la ironía de esto porque...
Luego se endereza y me mira fijame