Capítulo88 El tercer hijo.
Don Fernando tenía cuatro hijos. Los tres primeros eran hombres, y Lucía era la hija menor, por lo que era la más consentida.
—Usted, señorita, es muy astuta, adivinó mi identidad de inmediato —dijo el joven de camisa blanca mientras se acercaba, presentándose.
—Me llamo Adrián Fernández.
—Un placer, señor Fernández.
Adriana saludó con naturalidad y cortesía.
Adrián, sin poder evitarlo, fijó su mirada en la hermosa Adriana, y se puso rojo sin darse cuenta.
Hace un momento, él estaba en el piso de arriba y no tenía intención de bajar a recibir a los invitados. Sin embargo, una mirada casual al jardín lo dejó sin aliento: allí estaba una mujer que, con apenas un toque de maquillaje, brillaba como la luna en una noche de lluvia.
Intentando mantener la compostura, Adrián por qué estaba allí y preguntó:
—¿Se puede saber el nombre de la señorita?
—¡Ella se llama Adriana López! ¡Un placer!
De repente, una voz femenina poco amistosa sonó detrás de ellos:
—Jovencito, abre bien los ojos. En esta