Capítulo 29

Cuando vi a Damaris quise correr y abrazarla, pero conociéndola sabía que eso la incomodaría mucho, me acerqué a ella y ambas nos sonreímos.

—Es bueno volver a verte Talle —me dice llena de felicidad— por un momento pensé que te habías olvidado de mí.

—Eso jamás, te hice una promesa.

—¿Quién es esta...? —el ama de llaves pregunta viendo a mi amiga de arriba abajo como si fuera una amenaza.

—Es una vieja amiga —respondo sin mirarla.

—Creo que tu amiga debería marcharse —comienza a decir de nuevo con su voz chillona.

Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App