—Sí, pero ¿no hubo ni una sola pista de que pudiera ser tu compañero real? —preguntó, sus ojos entrecerrados—. ¿Ninguna?
Sacudí la cabeza.
—Aparte de que a mi loba le gustaba más que a nadie más que no fuera Ethan —dije encogiéndome de hombros—. Dio su sello de aprobación, pero no me presionó para ir tras él. Aún estaba doliendo por su antiguo compañero para realmente ir tras otro hombre. Para mí, era principalmente atracción física al principio, y luego creció en mucho más después de que llegué a conocerlo. No tenía idea de qué esperar.
—Eso es increíble —respiró—. Nunca conocí a nadie que tuviera una segunda oportunidad de compañero, así que nunca realmente supe cómo era. Solo he escuchado historias del internet. Es muy raro. Debes ser realmente especial para que la Diosa de la Luna te considere digna de una segunda oportunidad.
Me encogí de hombros.
—Tal vez es Gavin el que es especial y solo estoy aquí para el viaje.
—No te subestimes —dijo Nan mientras se dirigió a la cafetera par