Derek celoso.
—Preciosa no notaste algo extraño en Ali—
Roberto quería estar seguro de su pensamiento, era como verse a él mismo de adolescente, pero con cabello negro, Beatriz que se estaba alistando para irse a trabajar con su esposo, se quedo pensando, pero no, ella no noto nada extraño en el joven.
—No amor, no vi nada extraño en él, ¿tú sí? —
Sería mejor dejar sus pensamientos a un lado y no preocupar a su esposa.
—Solo que es muy pequeño para su edad, además que creo que es valiente para estar cerca de esos animales endemoniados—
—Creo lo mismo es un chico valiente, y su tamaño también me preocupa, le diré a Luigi que le recete unas vitaminas, ahora ayúdame con el cierre del vestido por favor—
Roberto se acercó y subió el cierre poco a poco, le encantaba sentir el olor natural de su esposa, él recibió la empresa que estaba en quiebra y logró negociarla, eran dos panaderías muy reconocida y con un mal manejo, aunque no le dieron mucho dinero, el logro comprar una pequeña casa y pagar los estud