Capítulo 153.
Un sonido agudo y plagado de miedo, es el despertador de Erick y Luciana en medio de la madrugada, quienes después de una noche increíble de reconciliación habían caído completamente agotados.
La luz de la luna se colaba entre los ventanales, y hacían un juego de luces en contra de la oscuridad de la habitación.
— ¡Erick! ¡Despierta! — Gritó Luciana al mismo tiempo que se levantaba corriendo y tomaba entre sus brazos a su pequeño hijo.
Mientras tanto, Erick había prendido el foco de la habitación para después acercarse corriendo a ellos.
— ¡Está hirviendo en temperatura Erick!
Luciana comenzó a desvestirlo para comenzar a bañarlo pero la mano de su pareja la detuvo.
— No lo hagas, no perdamos tiempo, vamos al hospital.
Luciana sentía una especie de sombra rodear a Erick ¿qué era lo que ella desconocía? ¿Por qué se comportaba de esta manera?
— ¡Vamos!— En ese momento Erick tomó a la pequeña Andrea y se fue directamente a la habitación de Amelia, quien salió confundida y entre sueñ