Por Valeria
Ordené todos los archivos para que mi reemplazante pueda abrirlos a medida que Alejandro le dé la clave de cada archivo, porque cada uno pertenecía a una empresa distinta.
Tenía el pasaje en mi celular, lo retiraba al día siguiente, en el momento de viajar.
Cerca de las 7 de la tarde me retiré.
No pasé a saludarlo, ni le avisé que me iba.
No valía la pena.
No valía nada para él, porque si no hubiera sido mi prima, hubiese sido otra cualquiera y luego de esa noche, la nuestra, no perdió tiempo buscando a otra en forma inmediata.
Nadie, en toda su vida, lo va a amar como yo lo amo.
Tampoco creo que eso le importe demasiado.
Llegué a mi departamento, Emi no estaba.
Nos veíamos poco, ella se quedaba muchas veces a dormir con Omar.
Va a terminar sufriendo, Omar es igual que Alejandro, cuando se lo quise decir, se ofendió.
Pareció que cortó la relación conmigo.
Prefirió engañarse a sí misma y distanciarse de mí.
Preparé mis valijas, guardé toda la ropa que pude.
La que más me gu