Ella se ríe. —Dices eso ahora, pero no tienes idea de cuánta maldita ropa tenemos—.

—Y tendrás aún más después del baby shower—, nos recuerda Jackson.

Lo miro a través de mis pestañas, de pie a nuestro lado. Aunque Sarah está hablando, sus ojos están únicamente en mí. Siempre noté cuánto me observaba antes, pero ahora se siente muy diferente. Ahora que he sentido esos ojos mirando mi forma desnuda. Ahora que he sentido esos labios que está lamiendo ahora mismo sobre los míos, recorriendo mi piel. Ahora que ha estado encima de mí, detrás de mí, dentro de mí. Se siente como si incluso él mirándome en este momento fuera una especie de juego previo, preparándome para que él tome lo que quiera de mí nuevamente.

—Ni siquiera me recuerdes ese baby shower—. Sarah se burla.

Tengo que obligarme a apartar la mirada de Jackson para mirarla a ella.

—Oh, no puede ser tan malo como te imaginas—, le digo.

—Si no hubiera sido Laury quien lo planeó, ni siquiera tendría uno. No tengo ninguna ilusión de