Capítulo sesenta y cuatro. La avaricia no conoce límites.
— — — — Narra Amy Carlson — — — —
El ambiente se congela. Mi cuerpo entero tiembla mientras trato de mantener la calma, pero sé que cada palabra de Arthur tiene el poder de desmoronar lo que queda de nuestra resistencia.
—¿Qué quieres decir? —pregunto, mi voz inestable, mientras Brad se acerca a mí para apoyarme.
—Que el juego apenas comienza —dice Arthur—. Que tan pronto como tú y Brad revelen la verdad al mundo, yo actuaré.
Un silencio oscuro se instala en la habitación.
—No le permitiremos eso —murmura Brad con voz firme.
Pero Arthur continúa, sus palabras están cargadas de amenaza:
—Tendré mis propios aliados, con información que ni siquiera imaginan. Mientras ustedes creen que tienen la verdad, yo tengo la llave para cerrarla por completo.
Las implicaciones son devastadoras. Imágenes, recortes de prensa, y documentos que hasta ahora hemos considerado nuestra arma, pueden ser manipulados por Arthur para vo