―Si quieres que todos escuchen y salgan corriendo a ver que sucede puedes seguir impidiéndome entrar. ¡Pero, no esperes a que vaya a la habitación de otra mujer!
Jessica, que escuchó estas palabras y rápidamente salió ―James, ¿Qué está sucediendo?
Astrid abrió la puerta a toda prisa, frunciendo el ceño ―Vete ...
Los tres se miraron.
En este momento, James fue tirado por la mano de Jessica, pero sus ojos miraron a Astrid. Su mirada estaba fija en donde Jessica apretaba a James, mordiéndose el labio, respirando hondo y tiro de James hacia la puerta.
―Jessica, ¿Qué haces tan despierta en la noche? ¿Y por qué no te cubres puedes resfriarte?
Jessica miró a Astrid sin inmutarse, y supo que acababa de ser imprudente, y no debería haber estallado así, y sonrió sarcásticamente ―Nada, es solo que tuve curiosidad al verlo parado aquí.
― ¿Oh? Entonces no me has visto en mucho tiempo, ¿No acabas de invitarme a tu habitación para charla? ―le dijo él, con un guiño.
La chica se pellizcó con fuerza, l