POV de Cercei
“Estás embarazada.” Las palabras resonaban en mi mente como una melodía que no dejaba de repetirse en mis oídos.
Estoy embarazada. Estoy embarazada del hijo de Lucian.
Esa revelación explicaba mis recientes cambios de humor, la sensibilidad a los olores, las náuseas constantes y lo quisquillosa que me había vuelto con la comida.
Dentro de mi vientre, una nueva vida estaba tomando forma.
Las lágrimas se acumularon en mis ojos mientras acariciaba con suavidad mi estómago, aunque aún no había señal alguna de un bulto. Aparte de las náuseas matutinas, los mareos persistentes y los altibajos emocionales, no sentía nada más. Ni siquiera era consciente de la pequeña vida que crecía lentamente dentro de mí.
Debí haber considerado la posibilidad de este pequeño antes de dejar a Lucian y emprender este viaje al otro lado del mundo. No debí poner en riesgo a mi hijo no nacido.
Desearía poder retroceder en el tiempo, volver al momento previo a mi partida. Ahora solo sentía alivio de