ALESSANDRO

Tener los registros financieros de mi empresa, hacen que quiera despedir a todo el mundo. Realmente no me cabe en la cabeza cómo las ganancias han estado bajando en los últimos dos meses si la producción y los contratos han sido más altos que el año anterior. Llevamos dos meses del año y ya tengo perdidas, perdidas de dinero muy altas de miles de millones que no deberían de estar registradas. Si seguimos así vamos a quedar en la quiebra en cualquier momento.

— No comprendo qué pasa Aless, según todo lo organizado las ganancias deberían estar por encima de este monto— Kerrison pasa sus manos por su cara, manifestando preocupación

Kerrison Miller es mi mejor amigo y abogado de la compañía, por ello sabe absolutamente todo lo que pasa y yo no muevo un dedo sin que él se entere. Además, ha sido mi representante legal desde que empecé a trabajar de forma independiente y creé mis propias empresas, que hoy en día son las más importantes y reconocidas a nivel mundial

—Si no lo comprendes tú, mucho menos yo Kerrison. Todo esto es demasiado raro, nada cuadra, nada de todo esto cuadra m*****a sea!—Me exalto, arrojando alguno documentos al suelo

De tantos años que llevo trabajando en mis propias compañías, es la primera vez que esto sucede. Mi rabia hace que todo quede hecho un desastre y caiga café sobre algunos de los papeles

— Lamento interrumpir, pero…— La cara de Abbygail, mi secretaria se descompone al ver mi rostro y todo a nuestro alrededor

— Continúa Abby —La invita Kerrison

— Oh, decía que el gerente de Manchester está al teléfono. Se le escucha muy alterado y pide que lo comunique de manera urgente —Habla demasiado rápido, pero entendible —Ya sé que a usted no le gusta que lo interrumpa pero creo que…

— Tranquila mujer, toma aire. Temo que en algún momento tengas un desmayo por falta de oxigeno —Kerrison, llama su atención respondiendo por mí, aun sí ella espera una respuesta de mi parte

— Pásame la llamada, ya mismo lo atiendo —Es lo único que pronuncio y la veo de vuelta a la salida

— Abby —La llama mi mejor amigo antes de que salga por completo —Podrías mandar alguien de limpieza a que se encargue de este desastre, por favor

— No —hablo— ¿Podría arreglarlo usted misma? Sé que no es su trabajo, pero son papeles importantes. Se lo tendré en cuenta y obtendrá algún bono extra en su pago

—Por supuesto, cuando termine su reunión me informa para hacerlo y no es necesario que me pague por ello, no es mucho lo que debo hacer —Sale sin más

Respondo la llamada de Andrew, quién se encuentra bastante atareado por la cantidad de negocios pendientes que tenemos. Le explico el proceso a seguir y lo despacho rápidamente dejandolo en comunicación con mi hermano, Victor.

Victor tiene a su cargo algunas de las compañías de esta ciudad, nuestra variedad de negocios está tan expandida que ni puedo con ello solo. Por eso, mi hermano lleva años haciéndose responsable de una parte de las empresas Finnerty.

No tengo ganas de tener reuniones ahora, pero es importante vigilar el trabajo de cada uno de mis empleados, tengo que saber cada paso que dan dentro y fuera de este lugar e incluso saber sobre sus movimientos bancarios. Alguien de aquí debe estar recibiendo sus "ganancias" por cada proceso ilegal que se práctica. Lo cierto aqui, es que lo único importante es dar con el responsable de lo que está pasando, porque estoy completamente seguro de que una persona cercana está detrás de todo esto y lo tengo que encontrar cuanto antes.

— ¿Abbygail y tú son amigos? —Dirijo la mirada hacia Kerrison, en busca de una respuesta

— Amigos, amigos, pues no te sabría decir que concepto tiene ella de amistad; Pero, nos llevamos bien, es buena compañera y me ha ayudado en algunas finanzas de la empresa de mi familia ¿Por qué? —cuestiona

— La llamas Abby, sigues teniendo la mala costumbre de llamar a los demás como te plazca—Le digo— Luego te metes en problemas y no sabes el porqué

La forma de ser de Kerrison es así, suele tomarse confianzas que los demás no le han brindado y en ocasiones eso le juega en contra en muchos aspectos de su vida.

—¿Abbygail sabe de finanzas?— Pregunto

— Sí. De hecho, es profesional. Se graduó hace cuatro años— Me comenta

— ¿Por qué trabaja como secretaria teniendo un título de más validez?

— Eres su jefe, eso deberías saberlo tú, no yo— Me regala una sonrisa pícara— Andas muy preguntón

— Solo me dio curiosidad, además, podría ayudarnos en todo esto. Lleva años trabajando para mí y para ser sincero, no confío en nadie y necesito ayuda ¿Debería confiar en ella?

—Creería que sí, nunca te ha fallado en nada y es bastante eficiente con su trabajo. Como amigo te lo digo, no es fácil trabajar contigo

— Si, cállate por favor. Cada que puedes lo mencionas y mírate, aquí estás a mi lado

— Porque soy tu amigo del alma. Bueno, no digo nada más— Levanta las manos en son de paz, cuando le doy una mala mirada — Me voy, cualquier cosa me llamas e inmediatamente estaré aquí. Me encargaré de revisar todos los documentos punto por punto para ver si cuento con un poco de suerte y encuentro algo que nos pueda ayudar.

—Le dices a Abbygail que pase— Me levanto para darle un apretón de manos.

independientemente de que sea mi amigo más íntimo, mi espacio de trabajo suele ser serio por eso, no pierdo la compostura y casi siempre lo trato como cualquier empleado; aunque, tengo que aceptar que suelo ser bastante flexible con él

Me centro una vez más en mi laptop, y la luz de esta hace que mi dolor de cabeza aumente. Suelo tener mucho dolor de cabeza cuando estoy estresado y este sin duda es uno de esos momentos, ver tantos números y gráficas hace que quiera enloquecer

El sonido de la puerta hace que salga de mis pensamientos.

—Adelante— Me escucho decir

Abbygail entra y sin mencionar una sola palabra empieza a recoger el desastre que dejé hace un rato. No suelo tener estas actitudes, me dejé llevar por la rabia.

Me permito dejar a un lado lo que estaba haciendo y observar un poco.

Es una mujer muy bonita, de estatura baja, cabello color chocolate y contextura delgada pero todo perfectamente moldeado de acuerdo a su cuerpo. Es un cuerpo diferente, pero en el buen sentido de la palabra. Realmente, observando bien me doy cuenta que su contextura no es exactamente así, parece una persona que no está tieniendo una buena alimentación y no sé está cuidando como es debido. Sin embargo, no deja de ser linda, se caracteriza por dejar a todos con la boca abierta. Suelo escuchar comentarios en el pasillo, y la he observado una que otra vez, más que todo porque admiro su capacidad de trabajar y hacer todo a la velocidad de la luz. Es bastante ágil en esto, se le da bien.

— Señor, estos papeles mojados los arrojo a la basura o son demasiado importan…— Su mirada se queda fija en el papel empapado que está en la mesa

— Esto es… esto es un dineral— levanta la vista dándose cuenta de que lo dijo en voz alta — Oh, lo siento. No debí leer esto

— No hay problema. Y sí, es un dineral— pronuncio, levantándome y haciendome a su lado— Kerrison me dijo que eras buena en finanzas, necesito que me ayudes en algo.

Le paso unos nuevos documentos que imprimí para que los lea y detalle lentamente. La dejo interpretar sola sin darle explicación alguna, de alguna manera quiero saber que tan buena es en esto y si encuentra algo que a mí se me haya escapado.

—Es claro, las estadísticas reflejan que se están desviando los fondos. Es la única explicación lógica que hay, ya que cada una de las contrataciones reflejan ganancia de millones…—Continúa explicándome y yo solo escucho— Algo muy importante que resaltar aquí— Toma mi esfero que cuelga en mi camisa, sin pedirme permiso— No se están estableciendo las fechas finales de los proyectos, es decir, que al finalizar no se tienen los gastos monetarios por completo, solo se tienen "posibles datos". Es una nueva forma de lavarse las manos y ultizar costos fantasmas de inverisones que no se llevan a cabo en ningún momento— Me explica

Son cosas pequeñas que Kerrison y yo no hemos tenido en cuenta. Me quedo asombrado de su capacidad de subrayar cada posible señal y cada posible proceso mal que se ha venido realizando en estos meses. Los ingresos vienen siendo desviados desde hace un año, pero era pocos y por eso no nos habíamos fijado. Parece que al ver buenas ganancias decidieron ir por todo y dejar a la empresa sin nada.

Ella sigue escribiendo números, sacando datos y cálculos que yo no podría hacer sin tener una calculadora en la mano, es asombrosa. Es un pequeño cerebrito, no pensé que detrás de ella hubiese alguien tan inteligente y bueno en estos temas, está perdiendo el tiempo siendo secretaria, tiene mucho potencial

—¿Por qué trabajas como secretaria?— Me atrevo a preguntar, ya que la curiosidad me mata— No es que sea algo malo, pero eres bastante buena en esto — Le señalo los documentos que tiene en la mano

— No todos contamos con la misma suerte. Necesito el dinero y nunca he encontrado una buena oportunidad laboral, señor. He aplicado a muchas ofertas y no he tenido suerte— Habla, sin levantar la vista.

Decido dejar el tema a un lado, porque se nota que le incomoda de alguna manera y lo que menos quiero es que sienta incomodidad. No está obligada a responder, es su vida personal y yo no debería estar haciendo preguntas privadas

— Trabaja para mí — Le ofrezco— Seamos equipo

— Pero si ya trabajo para usted—Me dice, haciendo que se me salga una pequeña risa que logro disimular y mantener la postura

— Trabajas para la empresa, no para mí. Lo que te quiero decir, es que me ayudes a encontrar el desfalco, que te hagas cargo de una parte financiera y tu sueldo aumentará, eso lo podemos negociar

Sus ojos empiezan a tomar un brillo y su boca se abre asombrada

—¿Aceptas? —Pregunto

— Por su puesto — Dice sin más, sin negociar si quiera su pago. Manifestando que lo que yo quiera aumentarle está bien y es absurdo, porque tiene la oportunidad de cobrar por sus servicios y no lo hace, simplemente se acopla a lo que yo digo y no debería ser así, le falta un poco de conocimiento. En este campo laboral tenemos que ser astutos e ir un paso adelante, porque el trabajo vale y algunos no tienen en cuenta eso.

La miro y refleja algo de nerviosismo, sin embargo, sus ojos no dejan de estar brillantes ante la idea de tener un aumento. Tantas es su felicidad que no ve a su alrededor y riega una taza de café que estaba sobre la mesa, dañando así de nuevo los documentos que ya había organizado.

Mi expresión cambia a una más seria, no me gustan este tipo de situaciones siento que es ineficiencia por parte de ella. Sin embargo, suele ser muy buena en casi todo así que solo le hago un pequeño comentario o más bien, una pequeña orden

— Recoge ese desastre y encárgate de imprimir nuevamente todos esos papeles, porque yo no lo voy a hacer nuevamente — Hablo seriamente—Recuerda que no trabajo con personas ineficientes, así que ten cuidado con ese tipo de accidentes

—Si señor, me disculpo —Dice en voz baja, dándome una pequeña mirada de disculpas

Hace lo que le ordeno en menos de cinco minutos y sale de la oficina, dejándome con muchas incógnitas en la cabeza que hacen que duela más. No ha sido un buen día y presiento que va a seguridad siendo así por mucho más tiempo, o por lo menos hasta que de con el culpable de toda esta situación tan delicada.

No sé si me esté equivocando o no, pero necesito respuestas y entre menos personas sepan, es mejor.