El jueves amaneció con la pregunta que Igor había estado evitando desde que video del ritual apareció en internet. La pregunta que hacía que su estómago se retorciera con familiaridad desagradable de traiciones pasadas. De guerras donde enemigo no siempre venía de fuera.

¿Cómo?

Había pasado la noche revisando cada fotograma del video filtrado. Analizando ángulos. Calidad de imagen. Marca de tiempo. Todo apuntaba a misma conclusión que había tratado de negar durante horas.

El video venía de cámara interna. Específicamente de cámara tres en el estudio de Stephano. La que Igor había