Le removio los dedos dentro de su cavidad haciéndolo gritar de dolor
—Nooo, dueleee, por favor
—Oh vaya, ¡perdón lobita mia! , jajajaja.
Volvio a ponerse frente a Luccer, se agarro su enorme verga y se la acerco a la boca y dijo
—Lamela mi lobita
—No, eso no, ¡prefiero morir!
Dracula se rió, hizo un ademan y el Lycan se dio cuenta que su boca se abrió, hacia lo posible por cerrarla y no podía, entonces vio que Dracula sonrió y se la metió de golpe hasta el fondo en la boca sintió que se ahogaba e hizo arcadas de sofoco.
El Rey vampiro se la saco y dejo que tosiera, volvió a ponérsela cerca diciendo
—¡Lámela lobita mia!, jajajaja
Y el Lycan lo hizo pero obligado por la magia de Dracula, su lengua se movia alrededor del glande y después subía y bajaba por