— La clase de hoy estuvo demasiado aburrida — dice Dagan mientras abre la puerta de la cabaña.
— Ni que lo digas, no paraba de bostezar.
Estamos por entrar cuando una mini jeep color café con la pintura algo botada a consecuencia de la lluvia, se detiene en la entrada.
Helena baja de la camioneta con maleta en mano, Dagan rápidamente baja las escaleras para ayudarle.— ¿Y River?
— Adentro, supongo. Vamos llegando.
— Hola — la saludo, pero ella simplemente me mira de reojo.
— ¿Por qué la maleta? — pregunta Dagan metiéndola a la cabaña.