El restaurante está ubicado en una zona exclusiva, al llevar me indican donde esta mi mesa y me informan que ella me espera, verla no es de mi agrado que me engañen menos.
-Cariño por fin te veo.
Se levanta inmediatamente y viene a mi dirección con intensión de besarme.
-No sabia, que a la señorita victoria le gustara besar a todos sus socios y mucho menos que le gustara engañar.
La veo ponerse rígida y cambiar su expresión
-Siéntate no hagas más el ridículo.
Me coloco en mi lugar esperando que ella haga lo mismo.
-Puedo explicarme Dilan.
-Me encantaría escucharte.
-Me gustas, lo sabes, pero tu solo tienes ojos para tu estúpida secretaria, incluso estas viviendo con ella, puedo entender que tengas necesidades y la uses como haría cualquier otro hombre, pero ella no es una mujer para ser tu esposa nunca lo podrá ser, tu necesitas una mujer a tu altura, que te ayude a formar un mayor imperio, no una que solo te lleve café y caliente tu cama, eres un hombre de negocios sabes lo que nec