Mundo de ficçãoIniciar sessãoEl lunes amaneció con titulares que Valeria había estado esperando pero que aún así la golpearon como puñetazos: "Matriarca criminal muere tras liberación polémica", "Giuliana Santoro fallece a los 68 años", "El fin de una era criminal". Los periódicos llenaban la mesa del desayuno del hotel, traídos por Carmen quien había salido temprano a comprarlos todos.
Lorenzo los leía en silencio, sus ojos escaneando las palabras con una comprensión que ningún niño de ocho años debería tener. Valeria no intentó quitárselos. Ya era demasiado tarde para protegerlo de la verdad.
El teléfono de Enzo sonó a las nueve de la mañana. Número desconocido. Contestó en altavoz







