Estoy completamente arruinada y ni siquiera sé por dónde empezar para sanarme de todo estas cicatrices dolorosas que afectan mi cuerpo.

‘Esto es más de lo que puedo lidiar. Es demasiado.’ Me digo mentalmente.

— Hija por favor, dinos ¿Cómo te podemos ayudar? Nos preocupas, querida.

— Necesito un tiempo a solas. Mi mano está lastimada y yo ahora… tengo muchas cosas que pensar. — pido y ellos parecen comprender que no tengo intenciones de hablar más.

— Tienes razón, lo mejor es que descanses. — dice mi padre empujando la silla de ruedas hacia la cama.

La habitación es tan pequeña que no tengo un solo segundo de privacidad porque no es posible en un espacio tan reducido. Sin embargo, la tensión y dolor que siento, me impide quedarme en silencio cuando sigo sintiendo que la muerte de Brenda es mi culpa.

— Ella está muy ma