Lucero y Neri reían al ver el video que Dulce había llevado a la mansión Bach, a su lado Tiago acariciaba el vientre de la joven Bach y veía con ojos de borrego a medio morir a Dulce, la cual negaba una y otra vez.
— Felicidades, aunque debo decir que lo supuse desde el primer día, ustedes acabarían juntos. — Dijo Lucero, que terminaba de ver como su amiga aceptaba ser la esposa de Tiago, ese video se convertiría en su favorito desde ese día.
— Siempre acabamos juntos princesa. — Neri hizo un gesto de horror con su rostro y Lucero comenzó a reír junto con Dulce y Tiago, jamás dejarían de molestar al ruso con su sentido del humor, tan descarado y de doble sentido.
— Ustedes… son de lo peor. —dijo Neri, pero aun así sus labios dibujaron una sonrisa.
— Entonces, ¿c