Al día siguiente regresaron al cuartel general, retomando los entrenamientos como lo propuso el príncipe Andrés por el orden acordado, las mujeres tenían su lugar para entrenar.

Tres horas después fueron al laboratorio, para ese momento el príncipe Adrik tenía un plan para trabajar sin riesgo, se los hizo saber:

—” Usaremos un equipo para trabajar sin correr ningún riesgo, tengo varios uniformes disponibles, Tío este es el suyo, papi tiene que utilizar este, Emly, Enky y Andrés, se pueden ir a cambiar.”—

Ellos le reciben los uniformes, se fueron a cambiar, el se quedó pensando por un rato, de pronto escucha a sus espaldas:

—” Me pequeño Adrik, ¿que te está preocupando?—

Adrik padre que se dio cuenta, le llegó cuestionando, el príncipe Adrik le contestó en voz baja:

—” No sucede nada papi, estoy analizando las cantidades del veneno, debemos rendir para las cuatro armas, nos falta varias armas para el día de enfrentar a la rata esa.”—

—” Tranquilo mi pequeño torbellino, si es necesario