Monke despertó y como era tradición fueron al salón a tomar desayuno, aún quedaban muchas cosas de la fiesta, así que Antonio y Arturo eran los más felices.
Monke llegó en silencio y se sentó a la mesa, allí su padre y la anciana curandera empezaron a increparlo por su falta de responsabilidad.
Antonio no sabía que hacer, necesitaba trabajar en algo para no estar con Mónica y tratar de no pensar en Kate
Fue donde Monke que estaba en el río -hola, como estás-
-Bien ¿Y tú?- respondió Monke
-Acostumbrandome a estar aquí-
-Antonio ¿Cómo era Rosa en la tribu?- aprovecho de preguntarle Monke
-Tranquila, una niña fuera de conflictos-
-¿Y el que la eligió en la ceremonia?- preguntó curioso Monke
-Juan, solo la eligió porque tenía que escoger a alguien, pero nunca fueron pareja-
Monke se alivió al oír eso
-Monke quiero ser útil acá en la tribu, dime ¿qué puedo hacer?-
-La verdad que los hombres se dedican a la caza y pesca, la tribu tiene muchas comodidades, así que no hay tanto trabajo-
-Ent