Antonio aprovecho lo que quedaba de tarde y fue al centro comercial, allí compró mantas, alfombras y una nueva cama ultra blanda.
Al llegar a la mansión ya Benjamín se había despertado y estaba en su nueva habitación ayudando a ordenar sus juguetes
-¿Te gusta tu nuevo dormitorio?- le preguntó Antonio
-Más me gusta estar con la abuela, mi mamá, tú y Eulogio-
-jajaja ¿te llevas bien con Eulogio eh?-
-Si es como tener un abuelo, una abuela y mis padres, como la familia que siempre he querido- dijo Benjamín
Antonio lo abrazó, a ese pequeño lo había rescatado de tres años, y sabia que no tenía más familia que su madre que murió en el accidente.
Kate seguía durmiendo, él había leído que las embarazadas pasaban con mucho sueño y sin despertarla colocó unas alfombras muy gruesas y suaves, y unas mantas acolchadas a los pies de la cama.
En ese momento Kate despertó al sentir peso sobre sus pies
-¿Qué haces?-
-Compré unas cosas para abrigar el dormitorio-
Kate incorporándose vio las alfombras y