El lunes siguiente llegué temprano como siempre, la primera en llegar fue Barbie, ella me miró y se sentó a mi lado.
— Estoy Tan cansada — Me dijo.
Yo la quedé mirando y no le contesté nada, hoy no quería saber en qué lugar lo había hecho con Viviano.
— ¿Ya le enviaste las fotos a tu primo? — Me preguntó.
Yo negué con la cabeza, estaba esperando alguna mala jugada de su parte para hacerlo, pero por el momento Domenic no había hecho más nada.
— Hola — Saludo Clau apareciendo de la nada.
Ella tenía una peluca corta color negro, estaba vestida de negro por completo, y tenia unas enormes gafas de sol que cubrían casi la mitad de su cara.
— ¿Y ahora a ti que te pasa? — Le pregunté.
Clau miró a ambos lados, se quitó las gafas de sol y nos miró.
— Domenic me amenazó — Nos dijo bajito.
Yo levanté la ceja, Domenic era una basura por completo.
— Deberías enviarles las fotos — Sugirió Barbie.
— ¡No! — Chillo Clau.
— Si lo haces vamos a terminar en prisión, él me lo dijo, sabe que nosotras tres e