¡Aitana! ¿Te quieres casar conmigo? Mírame, no llores por él, ves cómo él sigue con su vida sin importarle nada de ustedes. Tú deberías hacer lo mismo, permite amarte y verás que yo te voy a enamorar, mi vida - dice tomando su mano y la besa.
- No sé, Elian, porque no es justo para ti, llevo a su hijo en mi vientre y aún lo amo con toda mi alma - dice limpiando sus lágrimas.
- Es un idiota y en verdad tampoco quisiera que se case con mi hermana, porque no me parece una buena persona, un ser honesto por lo que te hizo a ti, pero bueno, si ella así lo quiere, bueno que se arregle, luego cuando la traicione a ella también. Te amo, Aitiana y siempre te voy a amar.
Yo te voy a respetar hasta que tú te enamores de mí, mírame, ya no llores por él, no más lágrimas, piénsalo, yo siempre voy a estar para ustedes - besa su frente y sin decir nada más se va de su habitación.
Se recuesta en su cama y piensa: ¿qué más puedo hacer para convencer a Aitiana para que me acepte?
Mientras, Aitiana piensa