Con pesar abrí mis ojos y los volví a cerrar luego de que la luz me sosegara. Al acostumbrarme analicé el lugar donde me encontraba. Lo reconocí al instante, observé a los lados buscándolo y lo hallé en el suelo sentado con la cabeza apoyada por la cama. ¿Se habrá dormido allí? Esperaba que no.
Los recuerdos de lo que pasó ayer volvieron a mi mente como pequeños flashes, sentí culpa y pena por haber arruinado una noche de fiesta para Seth.
Observé el techo hasta que se removió un poco. Al mirarlo nuevamente comenzaba a abrir los ojos y al igual que yo, analizaba su entorno. Al conectar nuestras miradas pude apreciar en ellos compasión pero luego volvió a enfriar su mirada siendo nuevamente el gélido hombre que conocía.
--- Buenos días. --- Le regalé una sonrisa amable. Sin siquiera responderme, se levantó del suelo y se dirigió al baño.
Suspiré con pesadumbre. Me incorporé buscando mi ropa ya que la que tenía puesta era la de Seth. Al encontrarla me mudo con rapidez, el vestido