Narrador Omnisciente.
A la mañana siguiente Abigaíl quería ir al taller, pero había acordado ir con Daniel y los niños de día de campo y cuando él pasó por ella se quedó impresionada con los hermosos niños y educados que la recibieron con alegría en cuanto ella entró a la camioneta.
—Señorita Abigaíl es usted tan bonita como dijo mi papá— dijo el niño mirándola con administración y la nena más pequeña se tapó los labios con inocencia.
—Eres todo un seductor pequeño— dijo ella impresionada por las palabras del niño y sin dejar de mirar lo tiernos que se ven.
—Tus hijos son hermosos—, Da