P.O.V. Eileen

Estoy en mi departamento preparándome para la fiesta de mis padres. Hoy llevo un hermoso vestido verde esmeralda, largo hasta los pies, con un corte en la pierna, un escote en forma de corazón y los hombros descubiertos. Me pongo el reloj que me regaló mi padre y unas zapatillas plateadas.

Me maquillo con elegancia y me recojo el cabello en un peinado sofisticado. Mientras hago los últimos ajustes, escucho un timbre en la puerta.

Voy hasta la entrada y abro. Allí está Christian, luciendo un elegante traje negro.

—Hola, mi amor, te ves radiante —me dice, dándome un beso en la mejilla.

—Hola, Christian. Tú también te ves muy bien —le respondo.

—¿Estás lista para irnos?

—Sí, solo déjame recoger mi bolso y ya estamos listos.

—Perfecto, te esperaré aquí en la puerta.

Voy a buscar mi bolso, que es del mismo color que mi vestido, y vuelvo a la puerta. Christian me ofrece su brazo, y yo lo tomo.

Cierro la puerta de mi departamento, y juntos caminamos por el pas