Capítulo 10. Algo había cambiado.
Maddie
Me besaba con tanta hambre que no pude controlar mis ansias y rápidamente a pesar de mi molestia comencé a corresponder, nuestras lenguas se unen en una deliciosa guerra y él me carga para que envuelva mis piernas en su cintura, mientras me sostiene por mis nalgas.
Puedo sentir su deliciosa erección contra mi centro y busco frotarme más contra su bulto buscando alivio en la zona que más lo necesito y escucho a Andrew jadear, mientras nos conduce hasta la habitación.
Cuando estamos ahí, me deja en la cama con cuidado y posa su cuerpo encima del mío.
— No sabes cuanto extrañe esto. — dice y vuelve a devorar mi boca con un beso posesivo, mientras sus manos acarician todo mi cuerpo.
Rápidamente encuentra la manera de deshacerse de mi camisón dejándome solo en bragas y empieza a succionar uno de mis senos mientras con su otra mano masajea el otro.
Puedo sentir mis bragas ceñirse a mi centro por lo húmeda que estoy por sus caricias y él suelta mi seno para darle atención al