Después de un rato, la pastilla finalmente hizo efecto. Estelle sacudió la botella y se dio cuenta de que solo quedaban unas pocas pastillas.
Habían pasado solo unos días y casi había terminado las veinte pastillas.
Dijo con voz débil: "Señor Hans, si gano, déjame ver a Yvonne. En cuanto a su custodia, haré todo lo posible para recuperarla".
Cuando se puso de pie, estaba demasiado débil para mantenerse estable, pero lucía firme. Sacó un taco de la estantería y lo sostuvo en su mano. "Comencemos el juego".
Rebecca la había estado siguiendo por temor a que se cayera al suelo y dijo preocupada: "Estelle, ¿estás bien? Ten cuidado".
"No te preocupes. Estoy bien", dijo Estelle, dando palmaditas en el hombro de Rebecca.
Durante su embarazo, que duró nueve meses, tuvo que soportar el agudo dolor en su pulmón todos los días.
Comparado con el dolor en su pulmón, el dolor en la incisión quirúrgica era insignificante.
Cuando estaba embarazada, podía soportar el dolor por el bien de Yvonne. Ahora,