Danielle fue una de las primeras personas que conocí al llegar a Miami al igual que a Selene. Ella fue amable, educada y linda. Obviamente todo eso era pura fachada, detrás de esa sonrisa con dientes perfectos y blanco, ese cabello rojizo intenso y ese cuerpo de sirena se encontraba una…una…no voy a siquiera decirlo pues no merece la pena hacerlo, además se supone que no le guardo nada de rencor, debo recordármelo a mí misma una y otra vez.
¿Ella era la hermana de Duncan?
Mi mente no podía procesarlo.
—Ella no es tu hermana —la primera en hablar, es Selene apuntándole con el dedo a Danielle quien termina por bajar los últimos escalones. Se colocá a un lado de Duncan.
—Ya lo sé —responde Duncan—. ¿Qué haces aquí, Danielle? Si Sophie te ve, se enfadara contigo.
Bien.
Me siento aliviada al saber que