Capítulo 13— Una niña
Narador
El auto se detuvo frente al club, y Seth salió del vehículo con una expresión de evidente disgusto. Miró a su alrededor, observando la fachada mal iluminada y el bullicio de gente que entraba y salía.
—Esto no es un club, es un antro —comentó con tono seco mientras cerraba la puerta tras de sí.
Simón lo miró de reojo, visiblemente irritado.
—No empieces, Seth. No estoy de humor para tus sermones.
Seth lo ignoró por completo y cruzó los brazos mientras observaba la entrada del lugar con desconfianza.
—¿Y tú crees que venir aquí es una gran idea? —dijo con una mezcla de irritación y cansancio.
Simón bufó, moviendo la cabeza con frustración.
—Hazme un favor, Seth; vete a la mierda.
Seth dejó escapar un suspiro pesado, pero no se movió de donde estaba.
—Haz lo que quieras, pero no te olvides de algo; tienes que empezar a hacerte responsable de tus actos. —Simón rodó los ojos y comenzó a caminar hacia la entrada del club, claramente sin intención de seguir dis