La catedral fue decorada con mucho esmero y los padres de Mauricio eran muy amigos del arzobispo monseñor Viña;así que su excelencia sería el encargado de unir a la feliz pareja;muy temprano en la mañana los novios desayunaron juntos y dieron un paseo por el jardín agarrados de mano.Era su momento de relax antes de que comenzará todo el ajetreo de la boda; Gabriel la estrecho contra su pecho fuerte y varonil;la miro a los ojos y le preguntó ¿eres felíz?«Si; inmensamente; te amo mi adorado»
Él la miró a los ojos y le susurró un te amo en el oído seguido de un beso apasionado.
El día pasó rápido y llegó la hora de ir a la Iglesia;Gabriel quiso ver a la novia y Victoria lo detuvo«Es de mala suerte ver a la novia antes de la ceremonia; ven amor para agregarte el nudo de la corbata ;ya está mejor.
—¿Listo Gabo? nos vamos.
»Si vamos papá?
Mauricio y Gabriel se fueron en el mismo carro; Asthon Lola y Victoria en otro; Emili y su padre el señor Juan Garcia irían aparte con el chofer de la