Capítulo 27.
La felicidad en la forma que Bradley la había experimentado dejaría de ser. Pues aunque el proceso finalmente se había desarrollado en un ámbito tranquilo, respetuoso y buscando en todo momento el beneficio de Alexa; el momento en que debían Lara y él firmar su divorcio estaba marcado en su agenda como asunto prioritario para las dieciséis horas de ese día.
Revisó cómo habían cerrado los mercados de Asia e hizo unas proyecciones que envió enseguida al piso de operaciones para que Caine y el resto de los corredores las tuvieran en cuenta.
Salió de su oficina y caminó con paso firme hasta la baranda de cristal templado y remetiendo las manos en los bolsillos de sus pantalones, observó con detenimiento a sus colaboradores inmersos en sus transacciones.
Su mirada cayó irremediablemente sobre Emma Henderson. Por alguna extraña razón, el piso de operaciones era el escenario perfecto para aquella diosa y su cuerpo elegantemente ataviado con una blusa de seda y una falda lápiz que se adh